Té de Jengibre
La raíz de jengibre es un rizoma de sabor aromático y algo picante, está llena de propiedades muy beneficiosas para la salud. Es sobre todo un poderosísimo anti inflamatorio, también antioxidante, por eso se sabe que nos protege ante el envejecimiento y algunos tipos de cáncer, como el de colon y ovario.
El jengibre, popular en la cocina asiática, se consume de muchas maneras porque se puede incorporar a muchas recetas en cocina, a refrescos, pasteles, sopas, licuados, zumos, pero una de las mejores maneras de consumir jengibre para aprovechar todas sus propiedades es en forma de té porque el agua caliente extrae fácilmente sus aceites esenciales cargados de moléculas muy interesantes para nuestra salud.
Propiedades del Jengibre
- Digestivo.
- Expectorante.
- Analgésico.
- Antibacteriano.
- Antipirético.
- Tónico.
- Estimulante.
- Afrodisíaco.
- Antiinflamatorio.
- Energizante.
- Adelgazante.
Beneficios del Jengibre
Entre los numerosos beneficios que aporta el jengibre a la salud gracias a sus propiedades, destacamos:
- Es un antidepresivo natural.
- Reduce los niveles de estrés.
- Estimula la movilidad de los jugos gástricos y mejora los procesos digestivos.
- Ayuda a prevenir el cáncer de colon y de ovario
- Alivia los principales síntomas del resfriado como la tos o la mucosidad, además de combatir enfermedades comunes como la gripe.
- Previene todo tipo de enfermedades cardiovasculares.
- Disminuye los dolores menstruales.
- Como todas las sustancias que mejoran la circulación, también estimula la libido y se considera un afrodisíaco natural. Favorece el movimiento de los espermatozoides y las erecciones.
- Combate el envejecimiento.
- Facilita las digestiones difíciles o pesadas.
- Ayuda a controlar las náuseas, los mareos y la fatiga, sobre todo en las mujeres que están en la época de embarazo.
- Es eficaz para acabar con enfermedades como la otitis o la cistitis, además de para tratar cualquier tipo de infección similar.
- Es realmente muy eficaz contra los resfriados: alivia los síntomas y favorecer la expectoración en caso de tener exceso de mucosa.
- Disminuye los síntomas de las migrañas, jaquecas y cefaleas.
- Favorece la expectoración.
- Reduce las molestias y dolores ocasionados por las ciáticas, lumbagos o reumatismos.
- Rebaja el hinchazón abdominal y la pesadez estomacal.
- Ayuda a expulsar los gases y a eliminar las flatulencias, sobre todo si se toma una taza después de las comidas.
- Uno de los principales beneficios del jengibre es que tiene propiedades adelgazantes
- Alivia los calambres musculares.
- Es beneficiosa para los dolores de garganta, especialmente para enfermedades como las anginas o faringitis al tomarla haciendo gárgaras.
- Reduce los niveles de colesterol en el organismo.
- Favorece la producción de saliva, siendo muy recomendable para personas que padecen de sequedad bucal.
- Limpia el hígado graso.
- Combate la halitosis.
- Alivia la sensación de mareo.
- Acaba con los cuadros de diarreas severas y otros problemas intestinales parecidos.
- Evita el estreñimiento si se toma en pequeñas dosis.
- Ayuda a desinflamar la nariz y descongestionarla en personas que sufren de sinusitis.
- Es útil para mejorar los dolores y molestias en las muelas y dientes.
- Favorece el riego sanguíneo debido a su efecto vasodilatador.
- Combate la depresión y otros cuadros médicos similares por presentar un alto contenido en capsaicina que ayuda a la producción de la conocida como hormona de la felicidad.
- Su efecto relajante reduce el estrés.
- Elimina el exceso de grasas en el organismo, de ahí que sea muy utilizada para adelgazar y en dietas.
- Evita el desarrollo de los síntomas del síndrome del túnel carpiano.
- Ayuda a elevar la masa muscular siempre que se combine con actividades físicas.
- Calma la tos y el dolor de garganta. Lo mejor es una taza de té de jengibre, pero también puedes probar las gominolas de jengibre o hacerlas en casa cociendo trozos de raíz de jengibre en agua azucarada (mejor si no es refinado) y tenlas siempre a mano. Es un excelente remedio para la tos y la corta de raíz.
Té de Jengibre para adelgazar
¿De verdad adelgaza el jengibre? Pues son muchas las propiedades que lo argumentan.
Tiene un efecto saciante, acelera el metabolismo y aumenta la termogénesis. Favorece la combustión de carbohidratos, la quema de grasa y la secreción de insulina, encargada de metalizar el azúcar presente en la sangre, reduce la acumulación de grasa en los vasos sanguíneos, por tanto disminuye el colesterol y la presión arterial.
Tomar Jengibre regularmente ayuda a adelgazar siempre que se haga dieta y algo de ejercicio.
Dósis de jengibre recomendada:
Entre 3 y 10 gramos diarios de jengibre fresco.
No más de 2 gramos de jengibre seco diarios porque es mucho más concentrado
Cómo se prepara el té de jengibre
El té de jengibre básico se prepara con dos únicos ingredientes: jengibre y agua.
Ponemos agua al calentar en una olla o en un cazo, según la cantidad que queremos preparar.
Las cantidades pueden variar según los gustos, no olvidemos que tiene un sabor picante y si lo preparamos demasiado concentrado podría ser desagradable. Si toleras bien el picante, no hay ningún problema.
RECETA BÁSICA:
>> Para un litro de agua podemos poner entre 6 y 8 rodajas de raíz de jengibre, para una taza basta con dos. Si usamos jengibre seco en polvo, es más concentrado y habrá que usar la mitad de cucharadas que de rodajas de jengibre fresco.
>> Ponemos el agua a calentar y cuando empieza a hervir añadimos el jengibre. Dejamos cocer a fuego lento unos 15 o 20 minutos, apagamos el fuego y dejamos reposar un rato.
Cómo tomar jengibre para adelgazar
La forma más cómoda de consumir jengibre para perder peso es hacerlo en forma de té, que combinado con otras sustancias como la canela o el limón, potencia sus propiedades y multiplica sus efectos. Al cocer el jengibre el agua caliente arrastra los aceites esenciales, vitaminas, minerales, antioxidantes y aminoácidos.
Prepara una cantidad suficiente de té de jengibre para poder ir tomando a lo largo del día. Podemos preparar un litro y tomarlo a sorbitos cada poco tiempo. Si lo prefieres puedes preparar el té en el momento para saborearlo caliente; en ese caso podemos tomar tres tazas al día después del desayuno, comida y cena.
A continuación encontrarás algunas recetas de té que combina el jengibre con otros ingredientes.
Recetas de té y otras infusiones de Jengibre:
Té de jengibre y canela
Sólo necesitas un trozo de jengibre del tamaño del pulgar y medio palo de canela.
Propiedades, entre otras: Desintoxicante, depurativa, sedante, digestivo, sudorífico, circulatorias, respiratorias, antioxidante, anticoagulante.
- Estimula y fortalece del sistema inmunológico.
- Calma el dolor de garganta.
- Frena envejecimiento celular.
- Ayuda a la eliminación de toxinas.
- Combate la retención de líquidos.
- Acelera el metabolismo.
- Ayuda a bajar de peso.
- Mejora y evita enfermedades cardiovasculares.
- Facilita la digestión.
- Reduce las náuseas.
- Mejora la circulación sanguínea.
Jengibre y limón
El jengibre y el limón forman una buena pareja de ingredientes saludables y adelgazantes. Podemos preparar té de jengibre como lo preparamos siempre y añadir un poco de zumo de limón, o podemos preparar limonada fría para el verano.
Esta bebida ayuda a deshinchar el vientre, evita los gases, ayuda a drenar y limpiar el cuerpo de toxinas, limpia el hígado y los riñones, evitando problemas de piedras o arena en el riñón. Además el poder antioxidante de esta bebida nos protege contra muchos tipos de cáncer y contra el envejecimiento.
- Al igual que el resto de infusiones y tés de jengibre, tiene todas sus propiedades a las que añadimos las del limón, que refuerza y complementa sus beneficios:
- Aumenta las defensas del sistema inmunológico.
- Alivia los síntomas de la gripe, resfriados y catarros, faringitis o las anginas, al tiempo que favorece a la expulsión de la mucosidad.
- Reduce la tos seca.
- Estimula los jugos gástricos y mejora la digestión.
- Mejora el estado general en caso de mareos y náuseas.
- Reduce la hinchazón abdominal.
- Mejora la circulación en el organismo.
- Produce más salivación, por tanto combate la halitosis.
- Mejora la sinusitis, desinflamando la nariz y facilitando la salida de las mucosas.
- Limpia el hígado.
- Combinado con el limón es más eficaz para adelgazar.
Jengibre, limón y ajo
El ajo aporta también su poder antibacterias, además de sus beneficios y cualidades cardioprotectoras, anticancerígenas, antiinflamatorias, antidiabéticas y antiobesidad.
Jengibre con zumo piña
La piña también acelera la combustión de grasas. Todos hemos cenado piña alguna vez para que nos entre la ropa del verano pasado que parece que ha encogido en el armario.
En esta receta usaremos la piña entera para aprovechar todas sus propiedades, sin peder su fibra.
Ponemos en una batidora unos trozos de piña y unas rodajas de jengibre, podemos poner también un poco de agua fría o unos cubitos.
También le va bien y aumentará el efecto saciante, drenante y adelgazante, si ponemos un poco de zumo de limón y unas hojas de menta.
Naranja y Jengibre
Al igual que el limón, la infusión de naranja y jengibre es un buen tratamiento en procesos gripales. Además también ayuda a combatir los dolores articulares, mejora la digestión y contribuye a mejorar el sistema respiratorio con un sabor más agradable que el del limón para las personas que no aprecian el sabor ácido y para los niños.
Tomillo y Jengibre
Se prepara con una cucharada grande de tomillo seco y un trozo de jengibre fresco para una taza de agua. Se puede agregar un poco de zumo de limón y una cucharadita de miel cruda. Se deja hervir unos minutos y se añade la miel al final con el fuego ya apagado.
Propiedades de la infusión de tomillo y el jengibre:
Antibiótico, digestivo, antiinflamatorio, antioxidante, diurético, estimulante, proteje el hígado.
Ayuda a reducir el volumen de tos , es un remedio para el estreñimiento y actúa de manera beneficiosa en casos de cistitis.
Té De Jengibre Con Cúrcuma
La cúrcuma tiene muchísimas propiedades complementarias a las del jengibre. La combinación de los dos da como resultado una bebida muy saludable, que hay que tomar sin hacer excesos.
Es un poderoso antioxidante y antiinflamatorio, buena para la circulación de la sangre y para reforzar el sistema inmunológico.
Si usamos jengibre y cúrcuma fresca ponemos unos trocitos de cada y dejamos que hiervan juntos un rato a fuego medio. Después de unos minutos apagamos y dejamos reposar unos 10 minutos.
Si usamos estas especias en formato de polvo, al ser más concentrado, usaremos menor cantidad y dejaremos cocer menos tiempo. Dejar reposar y colar antes de servir.
Té de jengibre y canela para adelgazar
Preparar el té de jengibre de la forma habitual. En el momento de poner el jengibre añadir una rama de canela o una cucharadita de las de café de polvo de canela por taza.
Dejar cocer juntos unos 8 ó 10 minutos a fuego lento. Apagar transcurrido ese tiempo y dejar reposar. Colar antes de servir.
Es importante no exceder las cantidades porque son dos sustancias fuertes, aunque no peligrosas si no se padecen enfermedades. En caso de embarazo la canela no es recomendable en dosis altas porque puede provocar contracciones. si se padece alguna otra dolencia, consultar siempre son el médico.
Esta bebida tomada regularmente ayuda a reducir la grasa de la cintura y a rebajar el perímetro del abdomen.
Contraindicaciones de la infusión de jengibre
El jengibre consumido en exceso por personas que han padecido anteriormente algún tipo concreto de enfermedad, puede tener contraindicaciones. Mira aquí si puede ser tu caso.
- Somnolencia en mujeres embarazadas o en la fase de lactancia.
- Cálculos biliares si los has padecido anteriormente debido a su propiedad colagoga.
- Aviva los problemas en la vesícula padecidos con anterioridad..
- Aumenta la tensión arterial al consumir esta infusión en grandes cantidades.
- El jengibre ocasiona ardores de estómago consumido en exceso.
- Puede irritar las mucosas y generar úlceras gastrointestinales y colitis.
- Empeora los síntomas de la enfermedad de Crohn o de colon irritable si se toma una dosis muy elevada.
- Puede interferir con medicamentos anticoagulantes como la aspirina o el ibuprofeno.